jueves, 30 de junio de 2011

HO´OPONOPONO

AUTOCURACIÓN POR DESESTRUCTURACIÓN DE LA RUTINA

Hoy sabemos que las enfermedades son desequilibrios energéticos, originadas en shocks emocionales que desestabilizan el funcionamiento de nuestro cuerpo.


Estudiamos entonces distintas terapias basadas en volver a equilibrar las energías, básicamente lo que hacemos con las medicinas del nuevo paradigma es equilibrar el flujo y las relaciones electromagnéticas de las partículas que conforman nuestro organismo.


Pero el cuerpo no se termina en nosotros, ya que éste funciona con el medio ambiente en homeóstasis. No podemos encarar una enfermedad sin tener en cuenta el medioambiente.


Existe otro factor muy importante que tiene que ver con el funcionamiento de los sistemas orgánicos y que raramente es tenido en cuenta por los investigadores de la salud: las rutinas.


Una de las formas más prácticas, rápidas y eficientes que he encontrado para la auto curación es la desestructuración, la reconfiguración del sistema que utiliza la enfermedad para desarrollarse.


Una enfermedad necesita una estructura como caldo de cultivo para terminar manifestándose con sus síntomas. Por ejemplo, un virus encontrará una estructura idónea en un sistema inmunológico debilitado. Una bacteria patógena encontrará una estructura maravillosa para reproducirse en un medio húmedo o de determinada temperatura.


Cuando nos encontramos enfermos, la enfermedad tuvo que seguir un proceso para desarrollarse, pero también tuvo que sentar sus bases en una estructura adecuada que le ofrecimos con nuestras costumbres que nos llevaron al estado actual del sistema.


La ira contenida durante mucho tiempo es también una estructura idónea para que las células cancerígenas comiencen a desarrollarse.


Por ello, la desestructuración del medio es uno de los recursos más eficientes para acabar con la enfermedad.


Si una persona deja de exponerse a la luz solar, se encierra, se pasa largas horas recibiendo la radiación del monitor del ordenador y no hace ejercicio físico, es muy probable que esté creando una estructura idónea para que se desarrolle una depresión.


Para liberarse de la depresión, puede cambiar su rutina, haciendo exactamente lo contrario. Tomar sol, salir a caminar y hacer ejercicio y dejar de conectarse a Internet por un tiempo.


Toda enfermedad necesita de una rutina previa como estructura para desarrollarse. Un sistema que se encuentre en determinadas condiciones.


Y de cambiar radicalmente esas condiciones, la enfermedad ya no encuentra las bases para continuar su desarrollo.


Por ello, es de gran ayuda, y puede llevarte a la cura completa, desestructurar el sistema que previamente le habías ofrecido a la enfermedad.


Cuando se manifiestan los síntomas de un desequilibrio en mi cuerpo, comienzo un proceso de auto curación con un lápiz y una hoja de papel.


Dos columnas: en una, las rutinas que vine haciendo en los últimos meses, en la otra, cómo las voy a cambiar.


Un ejemplo:


“Me venía levantando a las ocho de la mañana” y “ahora me levantaré a las siete”.


“Venía desayunando café con tostadas”, “Ahora desayunaré leche con cereales”.


“Últimamente estuve algo angustiada por no poder llegar a fin de mes” “Ahora prescindiré de aquellos gastos que son realmente innecesarios”.


Estos pequeños cambios en la rutina diaria, significan una gran desestructuración para la enfermedad que se está desarrollando. Estamos cambiando los circuitos de circulación de la información, estamos programando el cuerpo de una manera diferente, llevándolo a otro estado, un estado que ya no será igual que el que le habíamos ofrecido antes.


Esta técnica de auto-curación, es infinitamente flexible y puede incluso perfeccionarse y orientarse a cada enfermedad en particular si conocemos las rutinas que favorecen a una u otra dolencia.


La idea me surgió de una conversación que tuve una vez con una chamán al que le dije “quiero cambiar mi vida” y él me contestó:


-”Eso es muy fácil, lo puedes hacer de un día para el otro.”


Sorprendida, le pedí más explicaciones.


-“Haz una lista de lo que sueles hacer desde que te levantas hasta que te acuestas, y ahora modifica esa lista de un día para el otro. Si te levantabas a las ocho, comienza a levantarte a las siete. Si desayunabas café, ahora desayuna té. Si ibas a trabajar en autobús, ahora ve al trabajo en bicicleta. Si te vestías con pantalones, comienza a usar falda. Si ibas a visitar todos los días a tu abuela, ahora ve a visitar a tu abuelo. En una semana toda tu vida habrá cambiado completamente.”.


Lo que parecía algo sin sentido, en realidad era totalmente lógico. La primera vez que lo practiqué fue en medio de una separación trágica con una persona a la que quería mucho. Me sentía tan desesperada y enferma que decidí hacer la famosa listita y cambié de un día para el otro todas mis rutinas.


La recuperación fue increíblemente rápida, pero además, se manifestaron en mi vida nuevas posibilidades y recursos que antes ni había sospechado que tenía.


No me costó tanto hacer el cambio, sólo tenía que consultar la lista.


La segunda vez que lo hice fue frente a una bronquitis que casi acaba con mi sistema respiratorio. Cambié la hora de levantarme por la mañana, cambié la marca de pasta dental, tiré a la basura mi perfume preferido y me compré otro, cambié totalmente mis comidas, no sólo las horas a las que comía sino también los alimentos que consumía. Dejé de ver mi serie favorita en la TV, y me puse a ver documentales. Cambié la orientación de mi cama, antes dormía con los pies hacia el norte, ahora dormiría con los pies hacia el sur. En mi habitación había dos plantas, las cambié por otras especies.


Los resultados fueron asombrosos. En dos semanas la tos se había ido completamente y otra vez estaba sana.


Si a éste cambio radical de rutina le agregas acciones “personalizadas” a cada tipo de enfermedad, conociendo sus orígenes y su dinámica, es un gol.


Hoy tenemos acceso a mucha literatura que nos explica el origen emocional de cada enfermedad, para poder detectar cómo se ha producido y en que se basará para seguir su curso.


Por ejemplo, si la enfermedad es en el sistema digestivo, sabemos que en la lista debemos incluir un cambio de dieta, y también sabemos que debemos cambiar la percepción que tenemos sobre una situación que no estamos aceptando demasiado bien, algo “que no podemos tragar”.


Si se nos manifiesta una enfermedad en la piel, podemos estudiar si el sol será beneficioso para ella o no, pero también trataremos de poner en la lista si estamos teniendo alguna conducta que nos provoque un problema social, ya que los conflictos emocionales relacionados al contacto social suelen manifestarse en la piel.


También es muy importante que hagas una lista y ¡registres lo que haces cuando estás bien! Continúa con esa rutina, cuando estás bien.


Todo el medioambiente en el que vives tus rutinas cotidianas puede estar sirviendo de caldo de cultivo para una enfermedad, por ello hasta cambiar la decoración de tu casa puede servirte para desestructurarla.


Cuando te pongas a hacer la lista, verás que hay algunos ítems dentro de tus rutinas que parecen difíciles de cambiar. Por ejemplo uno de los ítems era mi horario de trabajo, eso no lo podía cambiar, pues el reloj de la entrada al laboratorio estaría esperando mi tarjeta a determinada hora.


Bueno, pues apliqué otro tipo de cambio a ese ítem: ahora en vez de salir de casa a las ocho treinta para ir al trabajo, saldría media hora antes y en ese tiempo caminaría por el jardín botánico todas las mañanas.


Los resultados de esta técnica son asombrosos y la aplico a cualquier situación de desequilibrio. Las rutinas son las estructuras que sostienen el desarrollo de las enfermedades, aprendamos a “desorientarlas”.


También es muy importante aprender a “escuchar” a la enfermedad y al cuerpo.


Una gripe por ejemplo, nos impulsará a acostarnos, nos dejará sin energía. Y esa relajación es necesaria para la curación. Generalmente ante una gripe seguiremos el ritmo desenfrenado de actividad, “tapándola” con un frenadol, y con ello sólo lograremos que se haga recurrente.


Lo más importante de “escuchar” a la enfermedad es detectar el mensaje que nos está transmitiendo. Las enfermedades son maestras, son guías y señales de acciones que estamos realizando en contra del camino más adecuado a seguir.


Cada enfermedad manifiesta una percepción errada de una situación. La enfermedad nos dice que en algo tenemos que cambiar nuestra actitud.


Si es un virus, nuestra atención debe estar en el factor que debilitó nuestro sistema inmunológico, generalmente una situación que nos produce miedo o angustia.


Si es una depresión, es muy probable que no le estemos dejando al cuerpo realizar su proceso vital de fotosíntesis, debemos exponernos mucho más a la luz solar y debemos beber más agua.


Si es una enfermedad de la piel, tenemos un conflicto de relación, con la pareja, un compañero de trabajo o la familia.


Hay un libro de Christian Fleche, “El origen emocional de las enfermedades”,  muy interesante, que puede ayudarnos como guía para detectar el origen emocional de las enfermedades, un libro que nos da una nueva perspectiva sobre el cuerpo como herramienta de curación, y que nos explica claramente cómo se manifiestan las diferentes enfermedades según el shock emocional que haya provocado su aparición.


Por  Bianca Atwell
Gracias por estar aquí, te mando un Abrazo de Amor. Rebeca Matute

TE REGALO

Una tijera para cortar lo que te impide ser feliz
Una puerta para abrirla al amor
Una escoba para que barras todo lo malo
Una frazada para cuando sientas el frio de la soledad
Una cajita para que guardes todo lo bueno


Un espejo para que veas lo hermoso que hay en ti
Un osito para que nunca estés solo
Unos lentes para que tengas una mejor visión de la vida

Gracias por estar aquí, te mando un Abrazo de Amor.  Rebeca Matute





“LAS PERSONAS TÓXICAS”

Los seres humanos somos individuales, esto quiere decir que cada persona tiene su propio mapa personal y único. Por mapa en Programación Neurolingüística (PNL), nos referimos al bagaje que cada quien trae consigo mismo. Por lo tanto, cada persona puede actuar y reaccionar de diferente manera ante un estímulo dado.

Las palabras como ya lo hemos dicho en PNL, tienen mucha influencia, tanto en nosotros mismos como en los demás. Nuestras palabras pueden motivar o pueden herir profundamente al otro.


Hay personas que han tenido una vida tan llena de amor, equilibrio, y cosas positivas que así funcionan por la vida y dan mucho a los que las rodean. Sin embargo, hay otras, que traen un saco lleno de decepciones, problemas y actitudes negativas que van regando esto en su camino con quienquiera que estén.

 Éste es el tema que vamos a abordar en esta ocasión. Vamos a hablar de las personas negativas, que son irrefrenables e incorregibles, porque creen en su interior que ellas están bien, pensando y obrando como lo hacen.

Les llamaremos a esta clase de personas, personas “tóxicas”. Este tipo de personas se encuentra en cualquier lugar. Puede ser tu jefe, tu amigo, hermano, o incluso tu pareja. Reconoces a una persona tóxica, porque es la que en forma continua
habla de temas negativos, en vez de halagarte por algo, encuentra el punto negro, no acepta a la primera una opinión o sugerencia, son hirientes, agresivos, inflexibles y se exaltan fácilmente si se les contradice. Ellos tienen la razón siempre.

Este tipo de personas afectan de diferente manera a cada quien. Si después de estar con alguien te sientes:
que pierdes energía, cansado, malhumorado por haber estado con ella, ignorado porque sólo habla de sí misma, aliviado cuando se va, que tensas tus facciones cuando está presente. Puedes incluso llegar a sentirte mal, muy mal, y al dejar a esta persona te llevas de regalo un dolor de cabeza o estómago quiere decir que estás con una persona tóxica.

Estas personas están reflejando lo que traen en su interior: mucha negatividad, resentimiento, envidia, celos, crítica, frustración, baja autoestima, necesidad de ser reconocidos, aprobados y ser importantes. Y lo que consiguen es justamente lo opuesto con su actitud hiriente y ruda hacia los demás. La gente tiende a alejarse de ellos y ser cautelosos e incluso sentir miedo porque la relación se torna difícil.

También hay personas tóxicas que muestran pasividad y se hacen pasar por mosquitas muertas, son los llorones, necesitan de tu ayuda constantemente, los de la vela perpetua, los solitarios, critican incansablemente a los demás, son metiches, y despiden con su actitud, lástima. Estas personas son desgastantes, porque te chupan la energía, tu tiempo, tu motivación y entusiasmo, que a ellos les falta. Ellos están vacíos y buscan llenar este hueco con tu amistad, relación, o compañía. Este tipo de personas te cansan, te aburren, limitan la conversación y tienes que darles ánimo constantemente (pierdes tu energía) porque ellos la despilfarran con sus pensamientos derrotistas que no llevan a ningún lado.

Una vez que hayas detectado, a personas como estas en tu vida, hay varios consejos de PNL que puedes hacer para no alterarte.

El Primer consejo, obviamente es alejarte de las personas que hayas identificado como tóxicas o como desgastantes. Muchas veces no es posible hacerlo, ya que están dentro de nuestro círculo social, de trabajo o incluso, familia. Convivimos en ocasiones con estas personas y no las podemos dejar de ver.

El Segundo consejo, es tomar una respiración o varias antes de estar con esta persona. Toma aire, para cargarte de energía y pensamientos positivos y así podrás pensar mejor. Más oxígeno te calmará y estarás en control de tus reacciones. Toma en cuenta que esta persona trae un bagaje diferente al tuyo y actúa con lo que tiene. No es personal, lo hace con todo el mundo, no sólo contigo.

El Tercer consejo, es  que elabores una protección para ti. Protege tu plexo solar. Esto lo haces, cerrando tus ojos, respira profundo y deja que tu mente fabrique una protección para tu parte emocional. Tu mente manifestará alguna forma con un tamaño, color y textura. Deja que surja, ésta será tu protección. Puede ser un vidrio, una puerta, un escudo, etc. Lo que haya surgido de tu mente está bien. Esta es tu protección para tu plexo solar para que no te afecte lo que ésta persona pueda decir o hacer. Ten presente tu protección cuando estés con este tipo de personas.

El cuarto consejo,  es cambio de tema. Sí, cambio de tema. Esto en PNL se le llama “estado separador”. Si la conversación está tomando un camino peligroso de reto, alteración y en contra de los demás y está creando tensión en el ambiente, lo que conviene es hacer “un estado separador” y esto es cambiar el tema sutilmente. Si se está hablando de política y la persona se está exaltando, pues cambia el tema a algo totalmente diferente como por ejemplo las vacaciones de primavera. De esta manera se apagan inmediatamente las emociones alteradas y al pensar en las vacaciones de primavera, surgen otras emociones más favorables. Si es necesario cambiar el tema varias veces, hacerlo con sutileza para no caer en el juego de una confrontación innecesaria.

Creo que al leer esto te habrá llegado a la mente alguna o algunas personas de tu entorno que son tóxicas o desgastantes. Es bueno identificarlas y prevenir cualquier choque con ellas con los consejos de arriba.
Sin embargo, es más importante ver si nosotros mismos no somos, al menos en ocasiones, personas tóxicas o desgastantesidentifiques con alguna de las personas negativas que mencionamos.


Gracias por estar aquí, te mando un Abrazo de Amor.  Rebeca Matute.

 

COMO MANIFESTAR TUS DESEOS


El poder de la Intencionalidad.

Aclarar tu más pura intención en todas tus actividades, en tus conversaciones, en tus deseos o metas, es liberarte del apego emocional hacia tus objetivos. La Intención es la proyección de la conciencia, deliberada y eficazmente, hacia algún objeto o resultado. Ese es tu poder de creación deliberada.


El Mapa de tus Deseos – El Estado de Ser.

El Estado de Ser es cómo te sientes respecto de ti mismo en cualquier momento, tema, asunto o situación. Todo se trata de la opinión que tienes de ti mismo.

Cuando alcances el Estado de Ser que coincide con tus más puras intenciones -el amor, la libertad y el pensamiento- podrás ver manifestados tus deseos más puros.


El Mapa de tus Deseos – La Visión.

Diseña varias afirmaciones dirigidas hacia tu objetivo concreto, como si ya se hubiera realizado. Deben llevarte a estados emocionales como si ya hubieras atraído lo que deseas. Dedícate a redactar con todo detalle y cuidado estas afirmaciones con palabras que impliquen que puedes ver ahora lo que quieres que se manifieste. En el momento en que estés sintiendo amor, alegría, satisfacción, optimismo, entusiasmo, poder personal, conocimiento o felicidad te darás cuenta que estás sintonizando con lo que quieres, y cuanto más logres esos estados emocionales, que son vibratorios, estarás atrayendo con fuerza lo que quieres experimentar.


El Equilibrio entre tus Deseos y tus Expectativas.

Somos seres vibratorios en un universo vibratorio. Si primero ajustamos nuestros pensamientos y nuestras emociones, si primero sintonizamos con la esencia vibratoria de lo que queremos, todo es mucho más fácil y el camino es bastante feliz. Cuando entramos en la imagen de lo que deseamos -y pensamos y sentimos desde esa imagen- nuestro futuro es nuestro presente. Con nuestros pensamientos tenemos el poder de producir todos los cambios que queramos experimentar en nuestra vida.


El Ámbito de las Relaciones – La comunicación.

Somos seres espirituales teniendo una experiencia física. Con esta experiencia física, entonces, tendremos que aprender a ser conscientes. Ser consciente significa pensar, sentir y actuar con el conocimiento de lo que se hace. Si somos conscientes de que así está conformada nuestra personalidad, podremos utilizar los tres estados del yo a nuestro favor para: Tener claridad en nuestros pensamientos, comprendernos a nosotros mismos y a los demás, mejorar nuestras relaciones con nosotros y con los demás, y tener una personalidad sana que nos ayude a estar en conexión con Dios, nuestra Fuente.


Obtienes aquello en lo que piensas- El ámbito de las cosas materiales.

Muchísimas personas creen que piensan frecuentemente en el dinero y que desean tener más dinero, sin embargo, lo que en realidad están pensando es en historias que se están contando con relación al dinero. ¿A quién tienes que perdonar? Revisa en este momento dentro de ti si hay algún asunto pendiente. Primero, con tus padres biológicos y tus padres de crianza, hermanos, parientes, amigos. Piensa quién crees que te ha herido de alguna forma…


Tu cuerpo es tu percepción – El ámbito corporal.

Los seres humanos nacimos bien. Un bebé naturalmente se siente satisfecho, seguro, optimista, entusiasmado, alegre, feliz, libre, se siente amado y da amor a manos llenas. Los seres humanos nos distanciamos de nuestro ser interior, de ese mundo interno que nos recuerda constantemente quiénes somos, debido a la programación o condicionamiento en la crianza. Recuerda siempre que Dios vive en ti. No te traiciones, ni te vayas hacia afuera, siempre entra en tu mundo interior donde está todo lo que tú deseas.


Tu negocio ideal – El ámbito de las actividades.

Cuando éramos niños, todos jugábamos a trabajar. Arreglábamos coches, cuidábamos bebés, éramos dueños de una tiendita, éramos los mejores deportistas, nos gustaba planchar la ropa, regar o vender cualquier cosa. Jugábamos a cantar, a actuar, a pintar. Si observamos con cuidado, en realidad los niños trabajan mucho…jugando.

Eres un experto en equilibrar tu energía. Y cuando eres muy bueno en este oficio, puedes ser, hacer o tener todo lo que deseas en esta experiencia de vida. Porque nosotros creamos en el nivel no físico .y convertimos aquello que no podemos ver en lo que sí podemos ver con la frecuencia vibratoria de nuestros pensamientos.


El compromiso con mi Bienestar.

Yo estoy comprometido(a) con mi bienestar porque sé que ser un experto en mi equilibrio vibratorio es el mejor oficio que pueda tener en esta vida.

Me doy cuenta de que cuando estoy describiendo una historia en donde yo me ubico como una víctima indefensa e impotente de las circunstancias y que siento que no me dan lo que estoy demandando, es porque en algún momento me empecé a aburrir, porque necesito estímulos. ¡Sé que necesito estímulos, que necesito sentirme vivo/a!

Así que en este momento, elijo sentirme vivo/a para sentirme muy bien, porque si me siento muy bien es el indicativo de que estoy creando la vida que deseo.


Permite la manifestación de tus deseos.

Date cuenta que en esta vida, la mejor elección que puedes hacer es ser feliz. Esta elección no tiene que ver con las elecciones de profesión, matrimonio o religión. Después de aprender y reflexionar sobre los diferentes ámbitos de tu vida en este curso, te sugiero que ahora sueltes todo para tomar la decisión más importante: ser feliz.

Pregúntate: ¿quiero ser feliz por el resto de mi vida sin importar lo que pase? Es una pregunta que al parecer tiene una respuesta obvia: ¡sí, desde luego! Sin embargo, puede ser que hoy te quedes sin trabajo o que tu relación de pareja termine. Si tu decisión es ser feliz porque estás comprometido con tu bienestar, fluirás con la vida confiadamente.

La decisión de ser feliz no es una decisión de evitar el sufrimiento. Experimenta tus emociones conforme se vayan presentando, acéptalas sin crear una historia alrededor de ellas. Sabes que tú no eres las cosas que tienes, tú no eres ni siquiera tus pensamientos ni tus emociones.

Conforme sigas con tu programa en el abandono a tu ser interior, comprenderás y recordarás quién eres en realidad.


Gracias por estar aquí, te mando un Abrazo de Amor. Rebeca Matute.


ESPEJOS

Todos somos extensiones del campo universal de energía, distintos puntos de vista de una única entidad. Esto implica ver todas las cosas del mundo, a todas las personas del mundo, y darnos cuenta de que estamos mirando otra versión de nosotros mismos. Tú y yo somos lo mismo. Todo es lo mismo. Todos somos espejos de los demás y debemos aprender a vernos en el reflejo de las demás personas. A esto se llama espejo de las relaciones. A través del espejo de una relación, descubro mi yo no circunscrito. Por esta razón, el desarrollo de las relaciones es la actividad más importante de mi vida. Todo lo que veo a mi alrededor es una expresión de mí mismo.


Las relaciones son una herramienta para la evolución espiritual cuya meta última es la unidad en la conciencia. Todos somos inevitablemente parte de la misma conciencia universal, pero los verdaderos avances tienen lugar cuando empezamos a reconocer esa conexión en nuestra vida cotidiana.

Las relaciones son una de las maneras más efectivas para alcanzar la unidad en la conciencia, porque siempre estamos envueltos en relaciones. Piensa en la red de relaciones que mantienes: padres, hijos, amigos, compañeros de trabajo, relaciones amorosas. Todas son, en esencia, experiencias espirituales. Cuando estás enamorado, romántica y profundamente enamorado, tienes una sensación de intemporalidad. En ese momento, estás en paz con la incertidumbre. Te sientes de maravilla, pero vulnerable; sientes cercanía pero también desprotección. Estás transformándote, cambiando, pero sin miedo. Te sientes maravillado. Ésa es una experiencia espiritual.

A través del espejo de las relaciones, de cada una de ellas, descubrimos estados prolongados de conciencia. Tanto aquellos a quienes amamos como aquellos por quienes sentimos rechazo, son espejos de nosotros. ¿Hacia quiénes nos sentimos atraídos? Hacia las personas que tienen características similares a las nuestras, pero eso no es todo. Queremos estar en su compañía porque subconscientemente sentimos que al hacerlo, nosotros podemos manifestar más de esas características. Del mismo modo, sentimos rechazo hacia las personas que nos reflejan las características que negamos en nosotros. Si sientes una fuerte reacción negativa hacia alguien, puedes estar seguro de que tú y esa persona tienen características en común, características que no estás dispuesto a aceptar. Si las aceptaras, no te molestarían.

Cuando reconocemos que podemos vernos en los demás, cada relación se convierte en una herramienta para evolución de nuestra conciencia. Gracias a esta evolución experimentamos estados extendidos de conciencia.

La próxima vez que te sientas atraído por alguien, pregúntate qué te atrajo. ¿Su belleza, gracia, elegancia, autoridad, poder o inteligencia? Cualquier cosa que haya sido, sé consciente de que esa característica también florece en ti. Si prestas atención a esos sentimientos podrás iniciar el proceso de convertirte en ti más plenamente.

Lo mismo se aplica a las personas hacia las que sientes rechazo. Al adoptar más plenamente tu verdadero yo, debes comprender y aceptar tus características menos atractivas. La naturaleza esencial del Universo es la coexistencia de valores opuestos. No puedes ser valeroso si no tienes a un cobarde en tu interior; no puedes ser generoso si no tienes a un tacaño; no puedes ser virtuoso si no tienes la capacidad para actuar con maldad.

Gastamos gran parte de nuestras vidas negando este lado oscuro y terminamos proyectando esas características oscuras en quienes nos rodean. ¿Has conocido personas que atraigan sistemáticamente a su vida a los sujetos equivocados? Normalmente, aquéllas no comprenden por qué les sucede esto una y otra vez, año tras año. No es que atraigan esa oscuridad; es que no están dispuestas a aprobarlas en sus propias vidas. Un encuentro con una persona que no te agrada es una oportunidad para aceptar la paradoja de la coexistencia de los opuestos; de descubrir una nueva faceta de ti. Es otro paso a favor del desarrollo de tu ser espiritual. Las personas más esclarecidas del mundo aceptan todo su potencial de luz y oscuridad. Cuando estás con alguien que reconoce y aprueba sus rasgos negativos, nunca te sientes juzgado. Esto sólo ocurre cuando las personas ven el bien y el mal, lo correcto y lo incorrecto, como características externas.

Cuando estamos dispuestos a aceptar los lados luminoso y oscuro de nuestro ser, podemos empezar a curarnos y a curar nuestras relaciones. Todos somos multidimensionales, omnidimensionales. Todo lo que existe en algún lugar del mundo también existe en nosotros. Cuando aceptamos esos distintos aspectos de nuestro ser, reconocemos nuestra conexión con la conciencia universal y expandimos nuestra conciencia personal.

Las características que distinguimos más claramente en los demás están presentes en nosotros. Cuando seamos capaces de ver en el espejo de las relaciones, podremos empezar a ver nuestro ser completo. Para esto es necesario estar en paz con nuestra ambigüedad, aceptar todos los aspectos de nosotros. Necesitamos reconocer, en un nivel profundo, que tener características negativas no significa que seamos imperfectos. Nadie tiene exclusivamente características positivas. La presencia de características negativas sólo significa que estamos completos; gracias a esa totalidad, podemos acceder más fácilmente a nuestro ser universal, no circunscrito.

Una vez que puedas verte en los demás, será mucho más fácil establecer contacto con ellos y, a través de esa conexión, descubrir la conciencia de la unidad. Éste es el poder del espejo de las relaciones.

por Deepak Chopra.
Gracias por estar aquí, te mando un Abrazo de Amor.  Rebeca Matute